COMUNICADO
Quienes amamos los libros queremos que en el Perú haya cada día más lectores. Por eso hemos convertido a la Feria Internacional del Libro (FIL) en la principal fiesta de la cultura en el país. Una fiesta inclusiva, global, amplia, que convoca a intelectuales, familias, profesionales, jóvenes, niños, amas de casa, jubilados y a todos aquellos que quieran disfrutar de nuestras más de 800 actividades culturales, más allá de la exhibición y venta de libros. La FIL está abierta para todos.
Movidos por nuestro deseo de sembrar lectores, hemos creado una tradición: reconocer a las personas que contribuyen a la difusión del libro en el país. Por eso, en los últimos años personajes de las más variadas opiniones ideológicas han merecido el homenaje de la Cámara en sus ferias principales. Repasemos brevemente: César Lévano, Oswaldo Reynoso, Francisco Miró Quesada Cantuarias, Alonso Cueto, Edgardo Rivera Martínez, Estuardo Núñez, Martha Hildebrandt, entre otros. Ninguno de ellos fue seleccionado por sus ideas políticas, sino por su aporte a la cultura y el mundo de las letras en el Perú. Pensamos que la sola mención de tan heterogéneo grupo de nombres así lo demuestra.
En este año, el homenaje principal de la FIL estará dedicado a Marco Martos, nuestro reconocido poeta, intelectual y presidente de la Academia Peruana de la Lengua. También se brindará un homenaje póstumo a Antonio Cisneros, y un reconocimiento especial a Martha Meier Miró Quesada, editora de El Dominical, suplemento cultural del diario El Comercio.
Sin embargo, el caso de la Sra. Martha Meier ha generado un encendido y agresivo movimiento de protesta en contra de esta decisión, adoptada en forma unánime por el Consejo Directivo de la Cámara, ente privado que organiza y financia íntegramente la FIL desde 1995. Respetamos las opiniones de quienes discrepan, pero nos parecen poco saludables las censuras ideológicas en un ambiente donde la apertura y la tolerancia deberían ser la norma.
Queremos rechazar todo tipo de intolerancia. Quienes estamos comprometidos con los libros, el pensamiento y la razón no podemos censurar, desde ningún punto de vista, el trabajo en beneficio de la cultura que realizan otras personas o instituciones. Menos aun si la discriminación obedece a sus opiniones políticas. No es tiempo de sectarismos, ni hay espacio para las mezquindades. El país necesita el concurso de todos los peruanos para lograr el desarrollo económico y cultural de la nación, que es la única garantía de ser ciudadanos libres.
CAMARA PERUANA DEL LIBRO
Presidente